el cerebro argentino valora a sus grandes hombres 50 años después. 23% del PBI destinado a educación.
El presidente argentino, en otras palabras y parodiando a Winston Churchill ha presagiado para los próximos meses: sangre, sudor y lágrimas.
Tratemos de traducir cierta alegoría Kafkiana. En un cuento premonitor Kafka se anticipaba. Un hombre va con un balde a comprar carbón para combatir el frío, se lo pone debajo de las piernas como si cabalgara el balde. El carbonero le advierte que ya no le puede vender carbón porque tiene deuda acumulada. El hombre tiene frío, necesita el carbón e insiste. De repente la mujer del carbonero aparece con una toalla y comienza a espantarlo, hasta que el frustrado comprador retrocede, se eleva y el balde se convierte en un caballo alado que lo transporta hasta la cima de las cumbres de las nieves eternas. El sentido del cuento es estremecedor: el calor, la calidez, y la hermandad de los hombres en este caso los argentinos, de darían paso a la congelación del prójimo, para convertirlo en contrójimo. El amor sucumbe y Sartre sentencia: “NO EXISTE EL INVIERNO, LOS DIABLOS ESTÁN AQUÍ”. Porque el diablo ahora es el otro!!!!. Kafka lo presagió.
Seguidamente y pintada la frialdad entre los hombres, nos sacude con su inmortal METAMORFOSIS. Gregorio Skanka es un hombre común, corriente, rutinario que vive en un departamento pequeño con su hermana y sus padres. Todos los días se levanta a las 6hs, toma el desayuno y rápidamente está a horario para tomar el tren que lo lleve a su trabajo. Cuando almuerza y cena, come pero nunca habla, no se le escapa ni un monsílabo y tiene cierto rencor con su padre. Una vida lúgubre y monótona. Hasta que llega el día en que despierta y no puede moverse, boca arriba, trata de incorporarse pero no puede, quiere apoyarse para levantarse pero no tiene brazos y su cuerpo es pesado, le golpean la puerta para que se levante pero no puede. Hasta que comprueba la metamorfosis: Gregorio Skanka se ha convertido en una cucaracha. Enorme del tamaño de un hombre. No puede hablar, emite sonidos. La madre golpea la puerta..hijo se te hace tarde!. El padre golpea, la hermana le habla tras la puerta pero no hay respuesta.
Pasan los días y todo sigue igual. Se apersona el dueño de las almacenes y le grita detrás de la puerta que no se abre…Señor Gregorio, tenga responsabilidad, no hagas sufrir a su familia, el trabajo lo espera; termine con esta actitud inexplicable. Gregorio puede darse vuelta y nota que se desplaza rápidamente y camina por las paredes, en vuelo corto llega a la otra pared; tiene todas las condiciones de una cucaracha. La madre le da comida por debajo de la puerta y es rechazada. La hermana le da cierta comida en descomposición que él prefiere entonces empieza a comer. Todo se acostumbra a la rutina. El padre se levanta y toma una decisión: hay que abrir la puerta, voltean la puerta y con su esposa observan aterrorizados solamente el rostro del hijo dentro del caparazón de una cucaracha. El padre no se contiene, trae una escoba y un cajón de manzanas. Comienza a tirarle con las manzanas que son proyectiles, Gregorio está en la pared, acusa las heridas y despide un viscozo líquido de color blanco.
Gregorio está herido, el padre enceguecido le arrebata la escoba a la madre y cuando le va a dar la estocada, la madre lo impide, discuten, el padre quiere terminar con esta historia y clavarle el palo en el centro entre alitas y patas que le sirven para adherirse a las paredes y al techo. El padre grita, este no es mi hijo!!!, la madre le quita la escoba, se interpone, y retruca: hasta aquí llegaste, no vas a matar a mi hijo. Se van, cierran la puerta. Durante días entrará una mujer a limpiar y corre con la noticia…la cucaracha ha muerto!. Todos salvo la madre sienten alivio, lo sacan y lo sepultan y todo ha vuelto a la normalidad.
Alegoría: las cumbres heladas es la muerte de la vecindad y convivencia. Todo es Frío. La metamorfosis es lo que ha producido en más de cien años, convirtiéndonos en cucarachas. El padre es el destino aciago que nos transformó para que nos despreciemos entre corrupción y mentiras. Y la madre es el conjunto de héroes y heroínas que son la fuente del siglo 10, los que nos dieron el ser, porque tuvieron el amor, la entrega y el dolor que solamente una madre puede dar.
Proverbio chino: si tienes sed, no te olvides de la fuente.
